El piloto de la avioneta, Francisco Javier Bejarano, fue de nuevo sometido ayer a una intervención quirúrgica en laque los médicos le practicaron injertos de piel en las dos piernas. Su evolución postoperatoria es favorable hasta el momento, aunque la situación que presenta el herido es estable dentro de que se encuentra muy grave. El comandante herido resultó quemado en un 85% del cuerpo.

El copiloto, Juan Carlos Lozano, que permanece en la unidad de quemados de la Paz, continúa estable dentro de la gravedad. El herido, que precisa de ventilación asistida debido al síndrome de inhalación de humos que padece, sufró quemaduras en el 35% de la superficie corporal.

Por el momento, se desconocen las causas que provocaron el siniestro en el que resultaron heridas de gravedad estas dos personas, aunque se baraja la posibilidad de que existiera un fallo en el motor de la avioneta. El Departamento de Aviación Civil continúa la elaboración del informe sobre las causas del accidente.