De esta manera, según informa el operador de la central, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha considerado el informe favorable emitido el pasado día 26 de julio por el Consejo de Seguridad Nuclear.

La autorización de Transición supone un reconocimiento al trabajo desarrollado por el equipo de la Central de Trillo, así como al esfuerzo inversor realizado en los últimos años para la mejora de su seguridad, actualización y modernización tecnológica, destaca CNAT.

Esta autorización se solicitó conforme al Protocolo de Cierre firmado en 2019, donde se indica que Trillo cerraría en 2035.

Trillo genera el 3% de la electricidad consumida en España, equivalente al consumo de 2 millones de hogares evitando la emisión de 2,6 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.

En la instalación se llevan a cabo inversiones por más de 40 millones de euros de promedio anual en la mejora de su seguridad, actualización tecnológica y modernización.

La central es un importante foco de desarrollo económico y social en su zona de influencia generando cerca de 1.300 empleos. Además, cada año, durante los periodos de recarga, se incorporan 1.000 trabajadores adicionales a la plantilla habitual.