En la clausura del II Curso de altos estudios estratégicos para oficiales superiores iberoamecianos, la ministra colombiana destacó que la situación de su país obliga a que las Fuerzas Armadas estén coordinadas con la policía y actúen conjuntamente en la lucha contra el narcotráfico y los grupos terroristas internos.

Pero reclamó que esta actuación coordinada no se quede ahí sino que debe trasladarse también a los distintos estados. "El problema afecta no sólo a los países productores (de droga), sino también a los consumidores", quienes ya conocen "de sobra" las conexiones entre narcotráficoy terrorismo, consideró Ramírez.

La ministra colombiana alertó de que la acción de los grupos de traficantes y terroristas pueden llegar a poner en peligro la propia existencia del Estado, y no sólo en el caso de Latinoamérica, sino también en el de los países desarrollados.

Por su parte, Trillo indicó que estos argumentos de su homóloga colombiana son una descripición "en carne viva" de lo que suponen los nuevos retos a los que se enfrenta la Defensa de las democracias y los estados de derecho. Ante estas nuevas amenazas, en las que la delincuencia organizada se aprovecha de las ventajas de la globalización, el titular de Defensa abogó por "romper viejas mentalidades" y poner las "capacidades de las Fuerzas de Seguridad del Estado y de Defensa" al servicio de la lucha contra el terrorismo "cuando su envergadura lo reclame o cuando provenga del exterior".