El fallo del Alto Tribunal señala que los motivos aducidos por la autoridad gubernativa para prohibir las manifestaciones en Canarias "n tienen bases de suficiente entidad", por lo que declara nula la decisión del Gobierno Civil de Tenerife.

Entre las razones que encuentra el Tribunal Superior canario para dejar sin efecto la decisión del Gobierno Civil figura que los responsables de la prohibición intentan impedir unos efectos violentos de las manifestaciones antes de que se produzcan.

Además, la sentencia señala que no existen motivos fundados que justifiquen esa medida, ya que la convocatoria de la huelga se ha hecho legalment, especificando el horario y el recorrido de las manifestaciones, por lo que la autoridad gubernativa "podrá adoptar las medidas pertinentes para evitar el peligro señalado".

A juicio del tribunal, la prohibición de una manifestación sólo puede hacerse cuando se deduce de quienes la convocan una actitud clara de violencia durante la celebración de los actos. "Nada de ello, sin embargo, ocurre en el presente caso", dice.

Para el Tribunal Superior de Canarias, suponer que existe un peligro en el ejrcicio simultáneo de los derechos de reunión o manifestación y de huelga "no parece aceptable", y califica la medida del Gobierno Civil tinerfeño de "radical y restrictiva".