La Ertzaintza logró detener a uno de los vándalos cuando huía del lugar de los hechos. Fuentes de la Policía Vasca señalaron que el arrestado tiene 19 años y en su poder fueron hallados un pasamontañas negro y una mochila que contenía, entre otros objetos, una tapa de un envase de pintura, guantes de látex y bolsas.

La detención se produjo sobre la una de madrugada, cuando una patrulla de la Ertzaintza observó a tres jóvenes encapuchados en la Avenida de Gipuzkoa de Irún, en las inmediaciones de la sede socialista.

Los desconocidos comenzaron a correr y los agentes salieron en su persecución, alcanzando a uno de ellos, que portaba la mochila. Los agentes comprobaron que, además de los desperfectos en la fachada de la sede socialista, en la acera habían arrojado pasquines sobre el acercamiento de presos etarras.

El PSE calificó este ataque como "una huida hacia delante de los radicales" y felicitó a la Ertzaintza por la detención de uno de los atacantes.

A través de un comunicado, los socialistas vascos indicaron que seguirán trabajando para erradicar cualquier manifestación de violencia, a través de la defensa del Estado de Derecho.

"Exigimos a quienes callan y eluden la condena de la violencia que demuestren que no son unos meros acólitos de la banda terrorista ETA y trabajen, de manera activa, en la eliminación de cualquier expresión de intolerancia y fanatismo de nuestra sociedad", señaló el PSE.