Los actos de protesta se reprodujeron en diversas localidades del País Vasco, en protesta por los hechos ocurridos ayer en dependencias policiales de Madrid y Bilbao en los que la presunta etarra Miren Gurutze murió y Xabier Galparsoro resultó herido grave.

A las 21,10 del viernes, también en Rentería, dos encapuchados hicieron bajar al conductor de un autobús de la línea San Sebastián-Rentería y prendieron fuego al vehículo, aunque pudo sofocarlo el proio chófer.

En Zumaya, un grupo de personas colocó, tras una manifestación, una barricada incendiaria en la N-634. Una vez apagado el fuego, la policía encontró en la barricada una bomba de "camping-gas" que no llegó a estallar.

Hacia las 12 de la noche, en el cruce de Altzo, en la N-I, un turismo chocó contra una barricada, aunque únicamente hubo daños materiales.

Por otra parte, en Basauri (Vizcaya), unos desconocidos rociaron con gasolina el interior de un coche francés, que quedó destruid. La posterior explosión del vehículo afectó a otros ocho turismos aparcados en las inmediaciones, así como a las lunas de un comercio y a las fachadas de los inmuebles cercanos.

En Portugalete, grupos violentos destrozaron las lunas de una entidad bancaria, mientras que, en Santurce, los alborotadores eligieron como objetivo un concesionario de coches. Otros recurrieron al lanzamiento de "cócteles molotov", tres contra la sede de Telefónica en Berango (Vizcaya) y uno en Alava, contra una furgoneta deRenfe.