CONSTITUCION UE

TRES DETENIDOS EN LA COSTA DEL SOL IMPLICADOS EN UNA ESTAFA INTERNACIONAL QUE SUPERA LOS 80 MILLONES DE DOLARES

- La estafa consistía en la venta fraudulenta de acciones de sociedades americanas

MADRID
SERVIMEDIA

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a dos ciudadanos americanos y a uno británico como responsables de una estafa cometida entre 1999 y 2002, consistente en la oferta telefónica de venta fraudulenta de acciones de sociedades americanas, que ha afectado a más de 2.000 personas en una treintena de países y ha alcanzado un importe superior a los 80 millones de dólares.

Los detenidos, Frank Louis P., Robert James C. y Donovan J. A., se encuentran ya a disposición de la Audiencia Nacional, para su posterior entrega a las autoridades judiciales de Ausburgo, donde se instruye la causa por los delitos cometidos contra ciudadanos alemanes.

La documentación obtenida en sus domicilios se está analizando en estos momentos, por lo que no se descartan el esclarecimiento de otros delitos diferentes a los investigados.

Las personas arrestadas promovieron el fraude mediante la utilización de un "boiler room" (término referido a la sala desde la que los vendedores convencen telefónicamente a sus víctimas) en el que trabajaban decenas de personas que contactaban con distintos individuos que figuraban en listas por haber realizado operaciones similares a través de teléfono o Internet.

La propuesta consistía en anunciarles la venta de acciones de sociedades inscritas en el mercado americano, que se iban a incluir en los mercados financieros, por lo que su precio de venta se multiplicaría considerablemente, produciendo enormes beneficios a quienes en ese momento fuesen sus propietarios.

Para la realización de este fraude, se constituyeron una serie de sociedades en España, y posteriormente, sociedades de igual denominación fueron inscritas en los registros americanos. Las acciones que se vendían eran de las sociedades americanas, pero los avales, garantías y referencias, se apoyaban en el grupo español, vinculado con ciudadanos americanos socialmente conocidos.

Los clientes debían ingresar el precio de la compra en cuentas que la organización delictiva tenía abiertas en Austria y Liechtenstein, desde donde se transfería el dinero a diferentes países, entre ellos España, justificando estos pagos en la prestación de diferentes servicios de infraestructuras y asesoramiento.

Finalmente, el dinero desaparecía y los compradores de las acciones veían cómo lo que habían adquirido no tenía valor ninguno, puesto que las sociedades americanas desaparecieron sin llegar nunca a cotizar en los mercados de valores.

Los agentes del Cuerpo Nacional de la Policía que han llevado a cabo esta operación en España están adscritos a la Comisaría General de Policía Judicial y a la Comisaría Local de Marbella (Málaga).

(SERVIMEDIA)
20 Ene 2005
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