Los afectados po la explosión son el teniente Luis Sanz Muñoz, el subteniente Octavio Fernández Cabito y el cabo paracaidista Carlos Milán Palleiro, que resultaron heridos leves.

Los hechos ocurrieron cuando un equipo de zapadores de la Agrupación Táctica Madrid se preparaba para estudiar una mina que encontraron en las inmediaciones del puente Bijela.

Según las mismas fuentes, las labores de reconocimiento para la reconstrucción del puente citado son fundamentales para la reapertura de la ruta principal del ríoNeretva de cara al próximo invierno.

Esta ruta de ayuda humanitaria, abierta por el batallón español en noviembre de 1992, estaba cerrada desde el pasado mes de mayo a causa de la voladura parcial del puente, que fue imposible reconstruir debido a los fuertes combates en la zona.

Tras los acuerdos conseguidos por Spabat con las partes en conflicto, los zapadores españoles actúan en la zona para inutilizar el minado de las inmediaciones del puente, con el fin de que éste pueda ser finalmente repardo.