Los especialistas consideran insomnes a aquellas personas que tienen dificultades para conciliar el sueño durante al menos una semana continuada.

Según el doctorSalvador Díaz Lobato, neumólogo y especialista en trastornos del sueño, aquellos individuos cuyos problemas a la hora de conciliar el sueño se mantienen durante más de treinta días deben ser considerados como insomnes crónicos.

Entre los factores desencadenantes de estos trastornos más habituales se encuentran las situaciones de estrés, la desaparición de un ser querido, las crisis sentimentales o las dificultades de tipo laboral o económico.

También influye la personalidad del paciente, ya que e doctor Díaz Lobato señala que las personas con dificultades para dormir "tienden a ser inseguras y a manifestar frecuentes episodios de ansiedad o depresión. También suelen ser hipocondríacos y, quizá por ello, muy dados a la automedicación".

El segmento de población que padece este mal con mayor incidencia es el colectivo de mujeres de edades comprendidas entre los 40 y los 50 años de edad.

Otro sector de población que presenta un preocupante índice de cuadros insómnicos, según el especialista,son los jóvenes de edades comprendidas entre los 17 y 19 años.

"La razón", explica, "parece estribar en que a estas edades se registra un importante cambio en la personalidad y se abandona el mundo adolescente para pasar al de los adultos, coincidiendo todo ello con el acceso a los estudios superiores, una prueba que les somete a fuertes presiones".

Asimismo, los especialistas han detectado que el insomnio está aumentando entre los niños. Entre las causas de este crecimiento destaca el importantenúmero de horas que los más pequeños pasan ante la televisión, según el doctor Díaz Lobato.

Este hábito sustituye los tradicionales juegos de los niños, más activos y que requerían un mayor desgaste físico y, por otra parte, muchos de los programas que ven en la televisión ofrecen contenidos "altamente excitable", lo cual deteriora los hábitos de sueños.

Junto al insomnio, otro de los trastornos que más frecuentemente incita a los pacientes a acudir a las Unidades de Sueño es la apnea, el síndrom caracterizado por interrupciones repetidas de la respiración mientras se duerme.