"Sólo habrá cambios sustanciales y de forma dinámica, flexible y consensuada en la medida en que se consolide un auténtico y real proceso de paz y avancemos hacia la renuncia definitiva a la violencia, el abandono definitivo de las armas, la entrega de éstas y la autodisolución de ETA", dijo Piqué antes de reiterar que "es a ETA a quien le corresponde la carga de la prueba".

Pique precisó que, hasta entonces, lo que se pudiera producir e este terreno "tendría la misma naturaleza de lo que se acaba de producir ayer, es decir la aplicación dentro de la actual política penitenciaria, de determinadas medidas que responden en general a un componente humanitario, pero que corresponde a la lógica que se ha venido aplicando en los últimos años, y que decide la Dirección General de Instituciones Penitenciarias".

Agregó que en estos momentos, el Gobierno no tiene ninguna previsión de que se vaya a producir ningún otro tipo de medida de estas cracterísticas "en los próximos días ni en las próximas semanas".

Piqué manifestó que el Consejo de Ministros no estudió hoy ningún informe sobre la situación de la tregua de ETA.