El director ejecutivo de Greenpeace, Juan López de Uralde, declaró a Servimedia "la falta de previsión" de la Generalitat ha dado pie a una situación en la que "cualquier solución será mala".

Tras alertar de que la falta de recursos hídricos en Cataluña será "difícil de resolver", el director de Greenpeace pidió "priorizar los usos de boca frente al consumo agrícola".

Además, y dado que "los trasvases sólo sirven para enfrentar a unas comunidades con otras", apostó por que los problemas de agua "se resuelvan dentro de las propias cuencas".

Ecologistas en Acción coincide con la opinión de Greenpeace y ha reiterado su rechazo a la realización de "cualquier tipo de trasvase" entre cuencas, dado "el gran impacto ambiental y social que producen".

A su entender, estos planes "se han demostrado ineficaces para suplir la falta de recursos en periodos de sequía" y, "al tiempo que producen graves daños en los sistemas hídricos", generan "graves conflictos entre regiones y comarcas nada deseables".

Esta ONG considera que el origen de los problemas hídricos en Cataluña está en que la Generalitat lleva años sin adoptar las medidas necesarias y permitiendo actuaciones insostenibles, como la construcción de viviendas unifamiliares, las mayores consumidoras de agua.

No obstante, la portavoz de esta ONG en Cataluña, Elisenda Forés, dijo a Servimedia que, si las infraestructuras que requeriría la propuesta de la Generalitat "son como han dicho" (reversibles), "tendrán que tragarse el mínimo impacto ambiental que generen para dar de beber a la gente".

Ahora bien, esta experta subrayó que su postura será "completamente distinta" si se llega a realizar el trasvase "para lavar coches o llenar piscinas" de la capital catalana.