Segismundo Crespo anunció esta medida, tras la reunión que mantuvo hoy con los representantes de once asociaciones de vecinos y comerciantes, en la que le expresaron su preocupación por el aumento de la delincuencia, prostitución y tráfico de drogas que sufren de modo sistemático esas calles del centro de la capital.

También asistieron a esta primera toma de contacto, la delegada de Integrción Social, Elena Vázquez, el jefe superior de Policía de Madrid, Manuel García Linarejos y el Comisario de Centro, Juan Zurera Molto.

Para solucionar esos problemas, Segismundo Crespo anunció la adopción de un plan integral de seguridad ante los acontecimientos previstos para 1992, que concretará la semana próxima con los responsables del ayuntamiento y de la Policía Municipal, y que posteriormente comunicará a los comerciantes de la zona afectada.

De este modo, está previsto un aumento importate de la presencia policial en los puntos conflictivos del centro urbano "que persiga sin cuartel a los traficantes, delincuentes, etc" afirmó el delegado del Gobierno.

En cuanto a los consumidores de droga que la policía encuentre en un estado físico grave, Crespo apuntó que "serán trasladados a centros hospitalarios para su rehabilitación".

También continuarán y aumentarán las medidas para expulsar a los extranjeros que desarrollen actividades ilícitas o no posean su documentación en regla.

Otra de las actuaciones previstas será el cierre de los bares, pubs, etc, en los que se descubra el consumo y trasiego habitual de estupefacientes.

Con la adopción de ese programa en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, el delegado de Gobierno manifestó su esperanza de que "la zona Centro de Madrid pueda volver a ser tranquila, para lo que señaló las intensas acciones policiales en curso, que están consiguiendo "resultados más exitosos que en años anteriores", concluyó.