Según fuentes del centro penitenciario navarro, los jóvenes han sido enviados, entre otras, a las cárceles de Herrera de la Mancha, Ocaña, Daroca, Soria, Teruel y otras de la Comunidad de Madrid.

Los trasladados son Mikel Rekalde, Pedro Oliver, Alex Belasko, José Miguel Aguirre, Jose Andrés Iribarren, Mikel Huarte, Antonio de la Cuesta e Iñigo Ramírez, quienes formaban parte de los 150 insumisos presos en Pamplona. De este total, alrededor de 50 están en segundo grado, tras haber scundado los llamados "plantes" al tercer grado penitenciario.

Según abogados del Movimiento de Objeción de Conciencia (MOC), no se han dado razones oficiales sobre estos traslados, si bien el director de la prisión indicó hoy a una emisora local que se trataba de una decisión de Instituciones Penitenciarias en Madrid, y por motivos reglamentarios.

Ante estas manifestaciones, los letrados del MOC señalaron que nunca se pueden producir tales traslados sin que medie una propuesta de la prisión de Paplona, y aseguraron que el reglamento penitenciario no recoge el traslado sino en casos de falta de espacio, "que no lo hay", y porque en la prisión no haya una zona para condenados de su grado, "que aquí existe. Legalmente nunca el traslado debe de ser un castigo, y éste no ha sido otra cosa que una medida disuasoria, sancionadora e ilegal".

La noticia ha levantado indignación entre las familias de los trasladados, algunos de los cuales se reunieron esta mediodía para intentar conocer algo más sobre us paraderos. Todos ellos coincidían en que las relaciones entre los presos insumisos y la dirección del centro penitenciario navarro se habían crispado desde comienzos de este verano.

Los abogados del MOC indicaron por su parte que nadie les ha querido dar razones sobre esta decisión, y reconocieron que los 8 jóvenes habían sido sancionados por su participación en protestas dentro de la cárcel.

"Tienen muchos partes", aseguraron los abogados del MOC, "algunos de ellos por acusaciones de los funconarios que los insumisos niegan, pero hay otros presos como ellos con igual número de partes. Este traslado sólo tiene una razón: ser un ejemplo para los que quedan en Pamplona".

Los letrados de estos insumisos, condenados a penas de prisión que oscilan entre el año y los dos años, cuatro meses y un día, están estudiando interponer un recurso a la decisión del traslado de Instituciones Penitenciarias. "El problema es que sólo cabe recurso contencioso-administrativo y ello supondría una sentencia detr de varios años", añadieron.

En este sentido, el presidente del Gobierno Foral, Juan Cruz Alli, se ha comprometido a realizar las gestiones necesarias para que los 8 jóvenes regresen a Pamplona, mientras IU ha demandado ya una reunión de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento navarro que estudie el tema.