En la sentencia, el Alto Tribunal da la razón al ciudadano italiano Alessandro Gasperi quien, tras ser condenado por un delito de tráfico de drogas y otro de contrabando, apeló al Supremo alegando que un delito debería ser absorbido por el otro.

El Supremo considera que, d acuerdo con el nuevo Código Penal de 1995, la pena contemplada actualmente para el tráfico de drogas es más elevada que la prevista en el anterior código y que es preciso tener en cuenta que con la nueva legislación, la condena podría dispararse hasta los 12 años si se aplican los delitos de tráfico de drogas y contrabando. Esta pena es considerada como "excesiva" y "sumamente grave", ya que se iguala a la del homicidio.

Así, establece que la relación entre tráfico de drogas y contrabando debe ser reulada de acuerdo con el artículo 8.3 del vigente Código Penal, según la cual "el precepto penal más amplio o complejo absorberá a los que castiguen las infracciones consumidas en aquel".