De los 4.471 fallecidos en ccidentes de tráfico durante el citado periodo, 128 fueron niños. Quince de ellos perdieron la vida como consecuencia de un atropello, mientras que el resto viajaban en vehículos de todo tipo, desde bicicletas hasta autobuses. Del total de fallecidos, 55 murieron en zonas urbanas.

El mayor número de muertes de niños se registró entre los pequeños que viajaban en turismos, un total de 93. Por accidentes en bicicleta murieron 6 niños, el mismo número que en siniestros de ciclomotor, y uno falleció en acidente de moto. Además de los fallecidos, 846 niños resultaron heridos graves y 2.612 leves, en los percances registrados en las carreteras.

Las estadísticas revelan que los niños son uno de los sectores de la población que más sufren las consecuencias de la siniestralidad en el tráfico. Por ello, la Dirección General de Tráfico ha organizado para la próxima semana unas jornadas en Salamanca, dedicadas a la educación vial en la infancia.

Las jornadas, que se celebrarán entre los días 15 y 18 de mrzo, en colaboración con la Universidad de Salamanca, tienen como fin estudiar las peculiaridades de la población infantil como grupo de riesgo, las estrategias de intervención y los diferentes enfoques adoptados en el ámbito docente sobre esta materia, y al mismo tiempo promover la educación vial como una labor de las instituciones.