En los cinco primeros meses de este año, el ministerio ha contestado a 1.691 escritos, según informó hoy en un comunicado el dpartamento que dirige actualmente Juan Carlos Aparicio.

La función básica de este servicio, comúnmente conocido como "línea caliente", es responder a las cartas, consultas y, sobre todo, peticiones relacionadas con las actividades propias del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

La mayor parte de los escritos que el departamento recibió en 1999 se refieren a asuntos sobre prestaciones de la Seguridad Social (42,6 por ciento), principalmente relacionados con la subida de las pensiones no contibutivas que promovían algunas comunidades autónomas.

Entre las sugerencias que hacían los ciudadanos para apoyar la propuesta del incremento de las pensiones mínimas destacan la separación de las fuentes de financiación de la Seguridad Social, el cobro inmediato de deudas de ayuntamientos y comunidades autónomas y potenciar el mantenimiento del puesto de trabajo y las cotizaciones hasta los 65 años.

Por otro lado, cerca de 1.420 cartas se centraron en aspectos relacionados con el empleo y demands de trabajo (18,3 por ciento), en su mayoría relacionados con apoyos a la reducción de la jornada laboral, medidas para evitar las prejubilaciones en las grandes empresas, protestas por denegación del subsidio por desempleo y solicitudes de permisos de trabajo por extranjeros.

Por último, un total de 251 cartas versaban sobre servicios sociales, tercera edad y discapacitados (5,7 por ciento). Predominaron las solicitudes de emigrantes españoles residentes en Hispanoamérica que pedían ayudas asistenciles por vejez, enfermedad o retorno a España; reclamaciones sobre concesiones de viajes del IMSERSO y solicitudes de ayudas para minusválidos.