Ambas denuncias fueron presentadas ante la Inspección de Trabajo y no en el juzgado de guardia, donde pensaban dirigirse en un principio los trabajadores, al considerar que la tramitacón en la inspección es más rápida.

Los trabajadores de las factorías onubenses de Fesa-Enfersa piden daños y perjuicios por el retraso del pago de la nómina de abril. Esta es la primera vez que denuncian este hecho desde que se aprobó la suspensión de pagos en la empresa, el pasado mes de julio, a pesar de que han llegado a soportar retrasos de hasta dos meses.

En esta ocasión, los trabajadores consideran una provocación la actitud de la empresa, después de que ha percibido un crédito del Estado or un importe de 2.500 millones de pesetas, que ha dedicado a adquirir materias primas y a pagar a los proveedores.

"No sabemos qué está pasando, porque si la empresa está en suspensión de pagos, tendrían que ser los interventores los que deberían distribuir el dinero con el que cuenta la compañía y no que sea ésta la que haga con los recursos lo que le da la gana", coincidieron en criticar algunos de los trabajadores afectados.

Los trabajadores denuncian haber recibido presiones de la empresa, qe se niega a pagar los salarios hasta que abandonen el bloqueo de materiales. Los empleados de Fesa-Enfersa aseguraron que no cumplirán la petición de la empresa hasta que se ponga en marcha la producción, se resuelva la regulación de empleo sin traumas y cobren sus salarios.