La plantilla, afectada por el expediente de cierre, reclama a la Administración que se cuantfiquen las indemnizaciones por despido y los complementos de las pensiones, además de apoyo a otras empresas alternativas que permitan su recolocación.

Esta medida, que fue decidida en asamblea, se enmarca dentro de los actos organizados por los centros de FESA-Enfersa en toda España en protesta por la decisión de Trabajo de autorizar los expedientes de cierre para cinco plantas del grupo, entre ellas la de Zaragoza.

Mientras tanto, el Gobierno de Aragón estudia apoyar en principio parte de los poyectos ofrecidos por la empresa PRISMA para recolocar a los trabajadores de IQZ.

La empresa PRISMA ofreció la instalación de una planta de tratamiento físico-químico de residuos industriales que fue rechaza por la Diputación General de Aragón por el impacto ambiental que pudiera producirse. Otros dos proyectos presentados por PRISMA, una planta de reciclado de pinturas y otra de recuperación energética de neumáticos, contaron desde el principio con el visto bueno del Gobierno de Aragón, siempre que s cumplan los trámites pertinentes y los consiguientes estudios de impacto ambiental.

Si estos dos proyectos últimos salieran adelante, se crearían 60 puestos de trabajo directos y otros tantos indirectos. Los 66 trabajadores de IQZ despedidos tendrían acceso a ellos una vez formados.

José Antonio Moreno, portavoz y miembro del comité de empresa de IQZ, ha indicado que "estas empresas traerían una inversión de 10.000 millones de pesetas, y lo que nosotros vamos a hacer es presionar para que se lleen a cabo".