LOS TRABAJADORES DE CARCESA, INQUIETOS ANTE LOS CONTINUOS APLAZAMIENTOS EN LA CONSTRUCCION DE LA NUEVA FABRICA DE MERIDA
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Un grupo de representantes del comité de empresa de Carcesa se ha reunido con el alcalde de Mérida, Pedro Acedo, para conocer a fondo el contenido de los compromisos adquridos entre el ayuntamiento y la dirección de la citada empresa, ante los continuos aplazamientos en la construcción de su nueva factoría, que estará ubicada en dicha ciudad.
Al término de la reunión, el delegado sindical de UGT, Cándido Martínez Mendo, señaló que "llevamos tres o cuatro años oyendo decir que la construcción de la nueva fábrica se acometería en pocos meses, pero pasa el tiempo y no se hace nada".
El representante sindical mostró la preocupación de los trabajadores porque se está ntentando que la recalificación de los terrenos que actualmente ocupa Carcesa para construir viviendas se lleve a cabo antes de construir la nueva planta, "cuando debería ser todo a la vez".
Al plantear el traslado de Carcesa se acordó que se facilitaría la modificación del suelo del emplazamiento actual, que pasaría de uso industrial a urbanizable, para, de esta manera, financiar en parte la construcción de la nueva fábrica.
"Queríamos saber si el actual alcalde mantenía el compromiso del anterir para que las dos cuestiones se resolvieran simultáneamente y ya nos dijo en agosto que sí. Lo que se trataba de saber con exactitud era qué compromiso", comentó Martínez Mendo.
Al parecer, la dirección de la empresa ha comunicado que la construcción de la nueva factoría se iniciará a principios del próximo año, aunque los representantes de los trabajadores no están muy convencidos de que sea cierto.
A esta sensación de inquietud se une el temor a la pérdida de puestos de trabajo. Cándido Martínz negó que esté en juego la viabilidad de la empresa, porque "se está ganando dinero", y señaló que lo que ésta se juega realmente es el futuro.
"Si se construye una fábrica más moderna, tememos que se reduzca la mano de obra", dijo. "Hemos pedido a la dirección que nos informe de cuáles son los planes para la nueva factoría y si se mantendrían los 104 puestos de trabajo, pero no nos hablan con claridad y creemos que eluden la cuestión para mantener la paz social".
Según el delegado de UGT, no seexplica porqué la dirección dice que todavía no se sabe qué personal será necesario, "ya que si es cierto que la fábrica se empezará a construir en pocos meses, ya deben saber qué secciones habrá y cuántas personas trabajarán en cada una de ellas".
Otro punto importante es el de la ampliación de la producción, ya que los sindicatos consideran poco viable mantener casi exclusivamente la rentabilidad basada en el paté, con alguna aportación de otros productos, como los callos y el magro.
Respecto alos temores de los trabajadores, el alcalde de Mérida se remitió a una reunión mantenida con los directivos de Carcesa, en la que éstos afirmaron que ya se han realizado importantes inversiones en terrenos y proyectos que garantizan que la construcción de la nueva planta va a seguir adelante.
La inversión total se situaría en torno a los 800 o 1.000 millones de pesetas, aunque no se puede precisar una cantidad por los cambios efectuados en el proyecto.
(SERVIMEDIA)
17 Nov 1995
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