Ramón Outerelo, presidente del comité de empresa, señaló que uno de los problemas más graves de la empresa es la paralización de obras para la Armada, como consecuencia de los recortes presupuestarios.

Además, afirmó que el impago de la deuda que tiene contraída la compañía pone en peligro el cobro de los salarios por parte de los trabajadores.

Unos 600 empleados se verán afectados por expedientes de reguación de empleo temporal, casi el 50 por ciento de la plantilla, a partir del mes de septiembre.

Los trabajadores en regulación de empleo celebrarán dos asambleas mensualmente, independientemente de las movilizaciones que sean acordadas a nivel estatal por el comité intercentros.

Los representantes de la plantilla de la factoría de San Fernando trasladarán sus protestas al ministro de Defensa, Julián García Vargas, al que consideran responsable de la falta de trabajo y de las dificultades financira que soporta la empresa.

El presidente del comité de empresa afirmó que las tres factorías de Bazán, situadas en San Fernando, Cartagena (Murcia) y El Ferrol (La Coruña), tendrán en 1991 un déficit de 17.000 millones de pesetas.

La empresa prevé, como alternativa de futuro, la construcción de lanchas para la Guardia Civil del Mar. En la actualidad, tienen encargadas la realización de varias patrulleras ligeras.