Los empleados, que demandan con estas nuevas accioes de presión, garantías en el mantenimiento de sus puestos de trabajo, retienen además a algunos miembros de la dirección empresarial, lo lo que calificaron portavoces sindicales de "reunión permanente", aunque desde la cúpula directiva esta acción ha sido calificada de "secuestro".

Las 4 factorías de Fesa-Enfersa en Huelva cuenta con una plantilla cercana a los 1.200 empleados, de los que un número indeterminado oficialmente, podrían perder su empleo debido a los ajustes que los propietarios de la cmpañía proyectan llevar a cabo en los próximos meses.

Entre las movilizaciones que han emprendido estos empleados destaca además el impedimento a la salida de material desde algunos de estos centros de fertilizantes.