La organización de las prácticas corre a cargo del Instituto Valenciano de Atención a los Discapacitados Psíquicos, según ha recordado el conseller de Bienestar Social, Rafael Blasco.

La realización de este curso de diez horas, que sigue a un programa de formación teórica, tiene como objetivo aproximar a los voluntarios al mundo de la discapacidad psíquica.

Para ello, monitores y coordinadores desarrollan una actividad de tiempo libre con los usuarios de la residencia,que puede consistir, entre otras, en juegos al aire libre, deportes o baile.

Según el conseller de Bienestar Social, Rafael Blasco, "el fomento del trabajo solidario tiene como fin la participación de la sociedad civil, un objetivo prioritario para la Generalitat Valenciana". A su juicio, "estas tareas altruistas incrementan la protección de los colectivos más vulnerables, entre las que se cuentan las personas con discapacidad psíquica".

En cada residencia realizarán las prácticas un coordinadorsiete monitores, que posteriormente participarán en los campamentos de verano, donde se desarrollarán diversas actividades.

Durante las prácticas, los monitores, inexpertos en el ámbito de la discapacidad psíquica, conocen el funcionamiento de una residencia y el trabajo que lleva a cabo el personal. Además, toman contacto con las personas discapacitadas, lo que les resultará muy útil para su labor posterior en los campamentos.

En los campamentos, los usuarios reciben la atención permanente de tabajadores voluntarios, que llevan a cabo su tarea como coordinadores o monitores.

En el año 2001 realizaron esta labor solidaria 383 jóvenes, en su mayoría estudiantes entre 18 y 25 años, que asistieron previamente a los cursos de formación que imparte el IVADIS.

En relación con la campaña estival de 2001, Blasco ha señalado que participaron 2.005 personas con discapacidad psíquica, que pasaron las vacaciones en 47 campamentos de la Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía o Murcia. Estas acampdas permiten un cambio de ambiente y, sobre todo, la integración en el entorno, ya que las actividades lúdicas se desarrollan en playas, piscinas, discotecas o fiestas populares.