Al acto de presentación asistieron Juan Carlos Andueza, delegado territorial de ONCE Euskadi; Carlos Sergio Achotegui, asesor de la Diputada Foral de Euskera y Cultura; Marcos Muro, director de Bilbo Kirolak; Mikel Almansa Martín en representación de la Federación Vasca de Ajedrez; Fernando Valdezate, presidente de la Federación Vizcaína de Ajedrez; Nicola Lococo, en representación de la Federación Vizcaína de Deporte Adaptado; y Alejandro Martínez Berriochoa, director General de la Fundación Eroski.

El torneo de ajedrez se disputará del 12 al 16 de diciembre en Kirol Etxea, y contará con la participación de 14 jugadores con discapacidad visual grave y de 10 ajedrecistas sin discapacidad, que jugarán con un antifaz. Entre los participantes, destacan 2 maestros internacionales: el campeón absoluto de Bizkaia y el campeón de Euskadi de la ONCE.

Se disputará por sistema suizo a 5 rondas, con un ritmo de juego de 90 minutos por jugador + 30 segundos de incremento por jugada.

La iniciativa ha sido muy bien recibida por las distintas instituciones sociales que la patrocinan (Diputación Foral de Bizkaia, Bilbo Kirolak, Eroski) y por distintas federaciones deportivas que colaboran en la misma (Federación Deporte Adaptado de Bizkaia, Federación Vizcaína de Ajedrez y Federación Vasca de Ajedrez).

DEPORTE INTEGRADOR

El ajedrez es un deporte de larga tradición entre las personas con discapacidad visual, por su facilidad para ser practicado de forma integrada en las competiciones con personas videntes.

Para la práctica del ajedrez, los ciegos necesitan sólo algunas adaptaciones en el material de juego. Por ejemplo, el tablero tiene los cuadros negros ligeramente más altos que los blancos para hacerlos diferentes al tacto.

Además, las piezas negras llevan, en su parte superior, una protuberancia que las distingue de las blancas. Cada casilla del tablero tiene un orificio en el centro, en el que se insertan las piezas a través de un pequeño vástago que éstas tienen en su parte inferior. Mediante este sistema, las manos del jugador pueden tocar todas las piezas sin derribarlas.

Las partidas entre ajedrecistas ciegos se juegan en dos tableros. Cada uno de los jugadores mueve las piezas en su tablero de modo que, al tocarlas, no moleste ni sea molestado por su contrario. Los relojes de ajedrez disponen de un mecanismo de voz con auriculares para acceder al tiempo de juego.