Según los datos facilitados a Servimedia por Ernesto Alvarez, miembro de GREFA, en lo que va de año se han registrado 716 entradas de animales y aves, cifra que, comparada con el volumen total del pasado año (en torno a las 800 entradas), es "una de las más altas de los ltimos años".

De acuerdo con sus informes, la mayoría de los animales que llegan al centro se han caído de los nidos a causa de las tormentas. En otros casos, son inmaduros que han empezado a independizarse y que, por efecto de las lluvias o los rayos, han resultado heridos.

La segunda causa más común que afecta a los animales que ingresan en el centro es el envenenamiento. Agricultores, cazadores y algunos "desaprensivos" espolvorean las fincas y los cotos de caza de veneno para evitar los ataqus de los zorros y numerosas aves sufren el efecto de estos venenos. Los responsables de GREFA aseguran que la tercera causa de ingresos es la desnutrición.

RAPACES Y TORTUGAS

Los que con más dificultad están soportando las tormentas estivales son los vencejos, los cernícalos, los mochuelos y algunas aguilas ratoneras y milanos negros (especie de la que esta temporada ha habido un importante movimiento migratorio, según GREFA).

Los buitres negros, las cigüeñas y algunas aguilas imperiales son la aves que más están sufriendo los efectos de los venenos, mientras que la desnutrición la sufren indiscriminadamente todo tipo de aves, según los ingresos registrados en el centro.

En lo que va de año destacan también las entradas de tortugas, algunas especies propias del sur de la península y otras que han sido importadas ilegalmente de distintos puntos del planeta.