El grupo de CiU, mayoritario en la Cámara, bloqueó en la misma sesión la propuesta de todas fuerzas para que se creara una comisión deinvestigación sobre la concesión de créditos y avales del ICF a empresas catalanas.

El portavoz de CiU, Raimon Escudé, alegó que un informe de la Sindicatura de Cuentas sobre la política de concesiones de créditos y avales entre 1985 y 1992, ya presentado en el Parlamento catalán hace un mes, demuestra que la actuación del ICF fue correcta en ese periodo.

El diputado socialista Martí Carnicer acusó a Alavedra de tener "responsabilidades políticas" en la actuación del Instituto Catalán de Finanzas a pesar de no solicitar su dimisión, y añadió que, tras la condena del director de este organismo a 7 años de cárcel por estafa, la Generalitat debía "ventilar" sus responsabilidades.

El representante del PSC recordó que el grupo de CiU en el Congreso de los Diputados había votado en su día a favor de que se creara la comisión investigadora del caso de Mariano Rubio, que consideró "menos grave" que el de Planasdemunt, porque "no hay condena".

Joan Puigcercós, de Esquerra Republicana de Catalunya(ERC), afirmó que el ICF otorgaba avales con criterios de "amiguismo" y que discriminaba a otras empresas que lo necesitaban más, mientras que Roc Fuentes, de Iniciativa per Catalunya (IC), dijo que la concesión se había realizado "vulnerando las condiciones legales parlamentarias".

El Partido Popular, a través de su portavoz, Josep Curto, manifestó que los avales se habían otorgado a empresas prácticamente en quiebra, desoyendo las recomendaciones de los informes técnicos.