TODA GALICIA FESTEJO EL PRIMER TITULO DEL FUTBOL GALLEGO
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Decenas de miles de gallegos festejaron anoche y hoy el triunfo del Deportivo de la Coruña en la final de la Copa del Rey de fútbol, el primer título nacional conseguido por un equipo gallego en la historia.
Aún no había terminado García Aranda de pitar el final de la final más larga de la histori, cuando miles de aficionados, que presenciaron el partido en los bares cercanos, comenzaron a abarrotar la Plaza de Cuatro Caminos en La Coruña.
Fue la explosión de un júbilo contenido durante los últimos años por una afición que esperaba con ansias un título, tras perder el de Liga el año pasado en el último minuto, al fallar Djucic un penalti.
A las cinco mil personas que tomaron en un instante la plaza señera del deportivismo se iban sumando seguidores, hasta abarrotar también las calles adyaentes. Fueron treinta mil personas las que gritaron, por primera vez después de cien años de historia del club, "Sí, sí, sí, la Copa ya está aquí", en medio de un estruendo de trompetas y bocinas de unos vehículos rodeados por una multitud eufórica.
Al grito de "¡Arsenio, Arsenio!", la fiesta en Cuatro Caninos duró hasta muy entrada la madrugada y se prolongó durante toda la noche en todos los barrios y bares de la ciudad, que improvisaron barras portátiles a las puertas de los establecimientos, hastaque agotaron en muchos casos las existencias.
La fiesta se celebraba simultáneamente en el resto de Galicia. La fuente de la Praza Roxa de Santiago de Compostela refrescó el sudor de la incertidumbre con que "los elementos" prolongaron una noche que iba a ser la más corta del año. Tres mil compostelanos coreaban el nombre del "Zorro de Arteixo" en una fiesta "deportiva" que destrozó cualquier atisbo de rivalidad entre las dos ciudades.
Y el júbilo cruzó el océano. La Casa de Galicia en Buenos Airs retumbó con el gol de Alfredo y el barrio de la Candelaria, en la capital venezolana, fue escenario de la alegría incontenida de la "Hermandad Gallega de Caracas". En Brasil, a la fiesta de la comunidad gallega se sumaron miles de cariocas solidarizándose con "San Bebetiño", Mauro Silva y Donato, que gozan de simpatías en todo el país.
"¡ARSENIO, VENTE YA!"
También en Sevilla se celebró el triunfo del Depor, ya que al ganar la Copa del Rey, jugará la Recopa de Europa el año que viene y deja su plaa en la UEFA para el Sevilla, cuya afición salió también a las calles sevillanas a festejar su plaza europea. La alegría sevillista se centró, igual que la gallega, en los agradecimientos a Arsenio Iglesias, verdadero artífice de los mejores años de la historia del fútbol gallego.
Los sevillanos despejaron en un instante sus dudas sobre el futuro entrenador y fueron unánimes al grito de "¡Arsenio, vente ya!".
La victoria del Deportivo obró el milagro en plano político e hizo posible un fuerte abrzo, con beso incluido, entre el alcalde de La Coruña, Francisco Vázquez, y su rival en la lucha por el gobierno municipal, Augusto César Lendoiro, el presidente deportivista que encabezó la lista del PP a la alcaldía de la ciudad. "Espero que sea el inicio de unas buenas relaciones en todos lo ámbitos", señaló el presidente deportivista.
Para las ocho y media de la tarde de hoy está prevista una recepción al equipo del Deportivo en el Palacio Municipal de La Coruña. Francisco Vázquez ya ha anunciado qe erigirá un monumento a Arsenio Iglesias en la Diudad Deportiva de Riazor.
Este mediodía, más de cinco mil aficionados recibieron a la expedición deportivista, que tras descender del avión subió a un autobús para dirigirse al estadio de Riazor y ofrecer la Copa a la afición.
Las calles por las que circuló el autobús con los campeones se vistieron de blanquiazul y una caravana de coches particulares seguían con estruendo la expedición. Toda la ciudad llenaba las aceras aplaudiendo y gritando los ombres de Arsenio y todos los jugadores. Aunque hoy no es día festivo en La Coruña, las pocas personas que permanecieron en sus oficinas se apostaban en las ventanas para ver este ambiente irrepetible.
Sobre la una del mediodía, treinta mil aficionados llenaban las gradas del Estadio Municipal de Riazor, a la llegada de los campeones. Lendoiro dedicó el triunfo a la afición, mientras el público pedía la intervención de Arsenio Iglesias, que sin embargo no pudo con la emoción y se retiró sin poder pronnciar unas palabras.
A las ocho de la tarde el R.C. Deportivo de La Coruña ofrecerá la Copa a la virgen de Nuestra Señora del Rosario, patrona de la ciudad, y a las ocho y media el alcalde ofrecerá la recepción en el Ayuntamiento, desde cuyo balcón los jugadores ofrecerán la Copa a la ciudad, que con toda seguridad abarrotará la Plaza de María Pita.
(SERVIMEDIA)
28 Jun 1995
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