TIRELESS. PIQUE ASEGURA QUE SI HUBIERA RIESGOS EXIGIRIA A GRAN BRETAÑA EL TRASLADO DEL SUBMARINO

- El ministro anuncia que el sumergible se quedará hasta marzo en Gibraltar

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, anunció hoy que el arreglo de la avería que afecta al submarino británico "Tireless", fondeado en Gibraltar, se prolongará como mínimo hasta el mes de marzo, y aseguró que si el Ejecutivo español tuviera la convicción de que xiste algún peligro exigiría a Gran Bretaña su traslado.

PSOE, IU, PA y CC fueron un clamor único en la petición de traslado del submarino nuclear británico y todos, incuida CiU, criticaron con dureza la actuación del Ejecutivo español por actuar más como portavoz del Gobierno británico que en defensa de los intereses de España.

El ministro, que compareció hoy ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, ha insistido en numerosas ocasiones en que la presencia del submarino no entraña ningn riesgo para la población, porque en caso contrario el Gobierno español habría ya solicitado el traslado inmediato del sumergible.

"Si en algún momento llegáramos a la convicción de que puede existir algún riesgo serio para la población lo haremos. Si en algún momento hubieramos tenido la convicción de que había algún tipo de riesgo serio para la población ya lo habriamos hecho. El planteamiento actual, que nos parece razonable y contrastado por los técnicos, es que es preferible y con menos riesgos ara todos, reparar el submarino en Gibraltar", aseguró.

Piqué quiso transmitir un mensaje de confianza a los ciudadanos y pidió responsabilidad a la oposición para no generar alarma social, un mensaje que no caló entre los miembros de la Comisión de Exteriores del Congreso, que le pidieron aclaraciones sobre la situación real y el alcance de la avería del "Tireless".

Piqué hizo un relato pormenorizado de lo ocurrido desde la llega del submarino a Gibraltar. Precisamente el modo en que el "Tireles" llegó a la colonia británica fue motivo de discusión entre el ministro y el portavoz socialista, Manuel Marín.

El retraso en la solución de la avería se debe a que la Junta de Control Británica está pendiente de los análisis que se realizarán en una pieza extraída el pasado lunes del buque, y en la consiguiente elaboración de un nuevo método de reparación y la homologación de las piezas.

El titular de Exteriores desmintió que el reactor del submarino siga funcionando, como se especula desde la posición, y aseguró que la información facilitada por el Gobierno británico ha sido en todo momento fluido. Además, insistió en que la confianza es una obligación entre dos gobiernos que son socios.

Por su parte, el portavoz del PSOE, Manuel Marín, exigió transparencia y pidió el Gobierno que "se reconcilie" con la sociedad y con el Parlamento" y para ello, recomendó a Piqué que pida "formalmente" el traslado del buque al Gobierno de Tony Blair y que haga pública tanto la pregunta como la respuesta. Marín repochó a Piqué que se incumpliera la normativa internacional en relación a tránsito de buques averiados. Según el diputado socialista, tras recibir dos negativas sucesivas de atraque en Malta y en una base italiana de la OTAN, el buque debió informar a las autoridades marítimas españolas de su situación al entrar en la vértical de Cartagena.

A partir de ese momento, las autoridades españolas, debidamente informadas, eran las que tenían la responsabilidad de autorizar el paso del buque que suría una situación de desgobierno. En el mejor de los casos, los socialistas denuncian que el Gobierno haya autorizado ese paso, el peor de los escenarios es que no tuvieran conocimiento del caso.

Piqué explicó las dificultades que puede implicar cualquiera de los tres métodos posibles para trasladar el submarino: el remolque, el uso de una plataforma auxiliar o el uso del motor auxiliar diesel del propio buque para tratar de ganar las costas británicas. Argumentación rechazada por la oposición que quire una posición política del Gobierno y no explicaciones técnicas.

CRITICAS DE LA OPOSICION

Marín insistió en que las relaciones entre España y Gran Bretaña, que tienen un gran número de empresas comunes, deben estar presididas por "la confianza y la transparerncia", que tras este caso "han sufrido mucho".

Para el PSOE, el Gobierno no ha aclarado si la presencia del submarino Tireless representa algún riesto para la población del Campo de Gibraltar y además dijo no entender porque ha sido el Goierno español el que ha asumido "la carga de la prueba" sobre la seguridad del submarino.

Además, acusó al Ejecutivo de "censurar" los informes de la Junta de Seguridad Nuclear española en La Moncloa y advirtió al ministro que la actitud de su grupo está siendo muy responsable, pese a que cuentan con información confidencial que respalda sus críticas.

José Luis Centella, portavoz de IU, pidió la dimisión del ministro y elogió en tono irónico las cualidades de Piqué que, a su juicio, parece estar haciendo méritos para convertirse en el portavoz del Gobierno británico".

Centella acusó a Piqué de ir al Parlamento "tarde y mal", haciendo dejación de sus responsabilidades como ministro del Gobierno de España y actuando "como cómplice" del Gabinete Blair en la ocultación de la avería y su alcance real.

Además, denunció el comportamiento "típicamente colonial" de Gran Bretaña, que ha obligado a Gibraltar a asumir los riesgos que "la metrópoli no quiere asumir". En consecuencia, IU exigió el tralado inmediato del submarino a un puerto británico y la dimisión del ministro de Exteriores.

En esta comparecencia, Piqué no contó ni siquiera con el apoyo de los habituales socios parlamentarios del Gobierno. Luis Mardones, de CC, e Ignaci Guardans, de CiU, fueron duros en sus consideraciones.

Mientras Mardones exigió el traslado inmediato del buque a algún puerto británico sin exigencia concreta de responsabilidades al Gobierno por su acturación, Guardans reprochó al ministro su falta de respet al Parlamento, al que no ha tenido informado.

Esta actitud es especialmente preocupante para CiU porque pone en peligro el compromiso de consenso institucional que tienen todas las fuerzas políticas con el Gobierno en materia de política exterior, que se sustenta en el compromiso de Piqué de comparecer y mantener puntualmente informado al Parlamento, una condición hasta ahora incumplida.

En consencuencia, Guardans le pidió "más respeto" hacia el Parlamento y exigió que el Ejecutivo aclare si exite riesgo para la población y si entraña dificultades el traslado del submarino, para poder adoptar una posició sobre el problema conocimiento de causa.

Para CiU, la crisis del "Tireless" está generando "un problema de política exterior y de como se administran las relaciones entre el reino de España y el Reino Unido", ante la "intolerable" actitud de "desconfianza" demostrada por Gran Bretaña hacia España, que su socio.

"No comprendo", dijo Guardans en su segunda intervención, "porqué en lugar d ponerse de este lado y venir aquí para buscar la complicidad del resto de los grupos y decir al Gobierno británico mi Parlamento me exige información, prefiere actuar como portavoz del Gobierno británico. No lo puedo comprender ni compartir".

(SERVIMEDIA)
29 Nov 2000
SGR