En su última revisión mensual del cuadro macroeconómico de los quince paises más desarrollados, correspondiente al mes de febrero, "The Economist"revisa al alza sus previsiones para la mayoría de ellos, y en el caso de España eleva su pronóstico de incremento del PIB del 3,9% al 4%, lo que le sitúa ya tres décimas por encima del objetivo del Gobierno.

Por contra, estima que la inflación será a fin de año del 2,5%, medio punto más de lo que prevé el Gobierno, y que la balanza por cuenta corriente arrojará un saldo negativo equivalente al 1,1% del PIB.

El crecimiento previsto para España supera en ocho décimas a la media estimada para el conunto del área del euro, que se sitúa en un 3,2%, aunque la inflación esperada para los Once es del 1,6%, casi un punto inferior a la española.

En el terreno del crecimiento económico, a España, Australia y Estados Unidos le seguirán Suecia (3,8%), Canadá (3,6%), Holanda (3,5%), Francia (3,5%), Bélgica (3,2%), Gran Bretaña (3,2%), Austria (3%), Alemania (2,8%), Italia (2,6%), Suecia (2,2%), Dinamarca (2,2%) y Japón (1%).

"The Economist" elabora sus previsiones macroeconómicas de cada mes promediano los pronósticos que le facilitan veinte grandes entidades financieras internacionales como JP Morgan, Merrill Lynch y Goldman Sachs, entre otros.