El articulista glosa la trayectoria política de Fraga bajo Franco, con quien fue ministro, y afirma que, ya como ponente de la actual Constitución, se opuso al reconocimiento de las denominadas "nacionalidades históricas".

"Hoy", sin embargo, añade la revista, "aboga por una amplia transferencia de competencias, de manera que desde el centro se dirijan sólo los asuntos exteriores, la defensa y la justicia" ya que, según el propio Fraga ha dicho, "el Estado se ha vuelto demasiado pequeño para algunas cosas, y demasiado grande para otras".

"The Economist" sostiene que, bajo el mandato de Fraga, "Galicia ha prosperado" y eso se refleja en éxitos empresariales como el de Zara y la potenciación del Camino de Santiago como una fuente de ingresos turísticos.

"Galicia, con sus 2,8 millones de habitantes, sigue siendo más pobre que otras regiones, pero menos de lo que antes era. Sin embargo, su gente joventodavía tiene que marcharse a la búsqueda de oportunidades en otros sitios. La resultante desproporción de votantes mayores y conservadores ayuda a Fraga a la hora de las elecciones", indica también el articulista.