Así lo establece una declaración que firmaron una treintena de alcaldes de ciudades españolas y extranjeras, que participaron en el Simposio Europeo de Cultura en la Ciudad, desarrolado estos días y que concluy hoy en el parque cultural Viera y Clavijo de la capital tinerfeña.

La misma declaración considera que la cultura debe favorecer la participación de los ciudadanos en todas sus manifestaciones y ser capaz, además, de motivar a personas de toda condición y origen.

Al encuentro, organizado por el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife en colaboración con el Consejo de Europa y el Ministerio de Cultura, asistieron cerca de un centenar de representantes de municipios, ministerios y organismos de la C.

Los reunidos debatieron aspectos relacionados con la cultura en los centros urbanos europeos, especialmente los dedicados a "desarrollo cultural y turismo", "la economía en la cultura y la problemática de su financiación" y "la ciudad, la cultura y la ciencia".

Según los participantes, "los trabajos surgidos en el seno de este grupo deben ser dinamizados por medio de la CE, el Consejo de Europa y de la Unesco, con el lógico respeto de sus específicas competencias".

MOTOR DE DESAROLLO

La eclaración sintetiza, entre otros puntos, "el interés y la voluntad de potenciar la acción cultural en las ciudades, la convicción de que la cultura es un motor de desarrollo y del dinamismo económico y social y de respuesta de la identidad de los pueblos".

La calidad y eficacia de las políticas culturales, señala más adelante, depende en gran medida del conocimiento el diálogo y la cooperación entre las diferentes ciudades y comunidades.

Para conseguir ese objetivo, los alcaldes que suscriben elmanifiesto deberán presentar la declaración común para su aprobación en el pleno de sus respectivas corporaciones.

El pronunciamiento también señala la importancia de establecer la cooperación entre las urbes y las administracines locales, con la intención de constituir la base del tejido sobre el que se desarrolle la integración cultural europea, libre y pluralista, de los pueblos que la componen.

Asimismo, indica que la cooperación entre ciudades debe favorecer, en cada una de ellas, un progres significativo al desarrollo cultural, impulsando una visión multiple sobre experiencias singulares.

Los ponentes consideran que el progreso cultural es parte integrante del desarrollo humano, "porque permite una serie de ventajas como ser un sustituto de la religión o lo sagrado, el uso del tiempo libre, la distración el desarrollo de la personalidad, un apoyo a la economía local y una integración del progreso científico y técnico en el desarrollo de las ciudades".

Entre los alcaldes que se adhiieron al documento figuran los de Murcia, Sevilla, Pamplona, Alicante, Bonifacio (Córcega), Stoke on Trent (Gran Bretaña), Tesalónica y Kalamaria (Grecia), Lisboa, San Roque y los cabildos de Lanzarote, Fuerteventura y Tenerife.