Según recuerda la Federación de Transportes y Mar de UGT en un comunicado, la huelga, los días 11 y 12 de marzo, fue convocada en defensa del carácter público de la estiba y en contra de la privatización que supone la aparición de las APIE (Agrupaciones Portuarias de Interés Económico).

Los huelguistas, asegura el comunicado, paralizaron las labores portuarias en las dos horas de paro de cada uno de los tres turnos en todos los puertos del norte de España.

Por su parte, en los puertos mediterráneos y extrapeninsulares, donde el sindicalismo corporativo es mayoritario, la huelga tuvo una importante repercusión en Sevilla, Huelva, Cádiz, Almería, Motril, Cartagena y Valencia.

En total, la mitad de los puertos españoles de interés general se vieron afectados por la huelga con importantes retrasos en las operaciones de los barcos.

Por otro lado, en el comunicado, UGT denuncia que en algunos puertos ha habido amenazas dirigidas a impedir el ejercicio del derecho de huelga. "Y singularmente en Huelva y Valencia ha habido coacciones empresariales, ya denunciadas a la Inspección de Trabajo, y alteraciones del sistema de turnos de trabajo", concluye el escrito.

La huelga se repetirá los días 10 y 11 de abril, y esos días será de 24 horas.