Así lo anunció este lunes en un comunicado en el que precisó que el lema escogido este año en torno a esta iniciativa, presentada con motivo del Día Internacional de los Voluntarios, que se celebrará el jueves, “hace hincapié en la parte más participativa y movilizadora de lo que supone una labor de voluntariado”.

"Es verdad que la atención en crisis se basa en la escucha empática, pero la atención no es solo escuchar; también somos una voz amiga al otro lado, una voz que acompaña y apoya en los momentos más duros", explicó Inés Paredes, vocal del Área de Atención al Voluntariado y vicepresidenta de la sede de Murcia, consciente de que, cuando alguien llama al Teléfono, "hay muchas y muy diversas voces formadas y preparadas para sostenerle".

Precisamente, algunas de esas voces se darán cita en un directo de Instagram el próximo martes 10 de diciembre, en el que varios voluntarios compartirán sus experiencias en la organización y responderán a las preguntas de los espectadores.

A este respecto, Paredes subrayó que en la organización participan “desde jubilados o personas que se han dedicado al cuidado del hogar y quieren dedicar su tiempo libre a una buena causa, hasta chicas y chicos más jóvenes”, sobre todo en el servicio de atención en crisis a través del Chat de la Esperanza.

DIVERSIDAD

En esta línea, la organización puntualizó que la “diversidad” se “extiende” también a las propias tareas de voluntariado, ya que, además de la orientación en crisis, es posible colaborar en otras áreas como acompañamiento en soledad, captación de recursos y organización de eventos, administración, comunicación o, si se es profesional de la psicología y carreras “afines”, también en atención especializada.

Entre los más de 1.300 voluntarios que forman la asociación también se encuentran varias personas con discapacidad auditiva o visual, como es el caso de María, voluntaria de la sede de Badajoz desde hace medio año, quien explicó que muche gente “no sabe, o no imagina, que sea posible, pero gracias a las aplicaciones de accesibilidad que facilitan las distintas organizaciones, o simplemente desde un voluntariado no presencial puede hacerse".

Tras aseverar que, aunque la organización tiene aún “mucho camino que recorrer” en este sentido, pese a que algunas sedes como la de Madrid, Albacete o Almería ya son también accesibles para las personas con movilidad reducida que quieran hacer voluntariado, Paredes indicó que lo único que deben tener en común todos los candidatos es "madurez personal, tiempo y bastante disponibilidad", ya que se trata de un voluntariado “muy profesionalizado, en el que es necesaria la formación inicial y continua en técnicas de escucha y de desarrollo personal".

“A cambio, las personas voluntarias obtienen una valiosa experiencia en el área de la salud mental y atención psicosocial, la posibilidad de ver reconocida su labor en los Premios Nacionales del Teléfono de la Esperanza y, por supuesto, ayudar a miles de personas”, sentenció la asociación.