Caldera insistió en que el Ejecutivo "s tan culpable de lo que está ocurriendo en Telefónica como su presidente", Juan Villalonga, y denunció el reparto de otros 5.000 millones de pesetas por este sistema entre directivos de Terra, propiedad de Telefónica.

El comportamiento de la dirección de Telefónica tiene, según Caldera, "muchas partes oscuras" y constituye un auténtico "pelotazo financiero" de cuya legalidad dudan los socialistas.

"Todo el mundo está preocupado por este problema menos el Gobierno que se limita a pedir transparenia", un elemento necesario aunque no suficiente, a juicio del PSOE.

Por todo ello, el Grupo Socialista reitera su petición de comparecencia para el presidente de Telefónica, Juan Villalonga, en su calidad de máximo responsable de una empresa que sigue siendo un monopolio y de cuya gestión el Palamento "no puede quedarse al margen".

Caldera citó el proyecto de Reglamento de la Cámara Baja, que no podrá ser aprobado en esta legislatura, pero cuyo artículo número 203 fue aprobado por unanimidad en Cmisión, donde se etablece establece que se podrá solicitar la comparecencia de los presidentes de empresas públicas "o de empresas que presten servicios públicos de caracter esencial o en régimen de monopolio" como es el caso de Telefónica.

El portavoz socialista denunció también extraordinarios incrementos de las dietas que reciben los 20 consejeros de la compañía "desde que llegó el amigo de Aznar, el señor Villalonga a la presidencia".

Según el PSOE, en 1996 estos consejeros percibían anualmene 1,7 millones de pesetas, mientras que en la actualidad cobran 52 millones de pesetas cada uno.

"Los ciudadanos tienen que saber como se reparten lo que obligatoriamente pagamos a Telefónica. Además de los pelotazos de 45.000 millones y de los 5.000 millones más que se repartirá Terra, el consejo de administración se reparte anualmente 1.057 millones para 20 personas", insistió.