De esta forma, Telefónica Móviles cumple con el compromiso adquirido en diciembre pasado con el Gobierno de tener completada la red de UMTS en el cuarto trimestre de 2003, así como lanzar de forma precomercial los primeros servicios UMTS.

La operadora también se ha comprometido a poner en servicio la telefonía móvil UMTS de forma comercil en 2004, si bien condicionado a que los nuevos terminales (teléfonos móviles adaptados para mantener una videoconferencia) estén disponibles en número suficiente.

Para ello, Telefónica Móviles invertirá 1.000 millones de euros en infraestructura UMTS entre 2003 y 2006. A finales del presente año la operadora habrá desplegado 1.100 antenas en las 52 capitales de provincia españolas y su objetivo es alcanzar de 7.000 a 8.000 estaciones de UMTS en 2005.

Aguilera subrayó que las estaciones base de a telefonía de tercera generación tienen un menor rango de potencia que las antenas de la telefonía móvil de primera generación o convencional, así como que, como todas las antenas actuales, las de la red de UMTS serán sometidas a mediciones de impacto radioeléctrico exhaustivas.

El consejero delegado de Telefónica Móviles destacó que las emisiones de las antenas son totalmente inocuas para la salud si las estaciones base están correctamente situadas y recordó que las operadoras de móviles han invertio 20 millones de euros en el plan de control y verificación de antenas.

TARJETA

A partir de ahora, unos 500 grandes clientes, en una primera fase, y posteriormente 2.500 usuarios cualificados de Telefónica Móviles, recibirán un dispositivo o tarjeta PCMCIA UMTS para utilizar de forma precomercial (y gratuita) la red UMTS a través de un ordenador personal portátil.

Los primeros usuarios del UMTS en España dispondrán de una transmisión de datos móvil en banda ancha, con velocidades superiores al DSL estándar (384 kbps frente a 256 kbps), lo que permitirá acceder a Internet, Intranet (redes internas de las empresas) y correo móvil.

En cuanto al lanzamiento comercial, Aguilera lo situó en 2004, pero subordinado a la disponibilidad de terminales, cuya fabricación depende de Ericcson y Nokia. Hasta que no se pueda contar con un número masivo de teléfonos, no se lanzará el servicio, pero será en 2004, aseguró.

El consejero delegado no se atrevió a hablar de precios ni tarifas, por ser prematuo. Las principales aplicaciones prácticas del UMTS son el acceso a Internet desde un teléfono móvil o un PC portátil y la videoconferencia desde móviles.

Esta última utilidad plantea algunas adaptaciones por parte del usuario, ya que el nuevo teléfono móvil no se acerca a la oreja sino que hay que colocarlo enfrente, a medio metro de distancia, para que la cámara del móvil (situada junto a la pantalla) recoja el rostro y el interlocutor pueda verlo en la pantalla de su terminal. El sonido se escucha pr altavoz o auriculares.