Se trata de una línea de la nueva Red Digital de Servicios Integrados (RDSI), que Telefónica puso en marcha en 1993 y que hoy llega ya a todas las provncias españolas, con capacidad para dar servicios de voz, transmisión de datos e imágenes.

Esta línea 15 millones de Telefónica supone un hito en la política de expansión de la compañía, cuyos responsables piensan proseguir en los próximos años, con el objetivo de alcanzar los 18 millones de abonados en el mercado nacional a finales de la década.

Según ha reconocido el propio Cándido Velázquez en los últimos días, el mayor crecimiento de clientes en los cinco próximos años se producirá en los negcios internacionales de la operadora, a través de sus sociedades participadas, principalmente en Iberoamérica.

Este negocio supone en la actualidad un volumen de 8,5 millones de abonados, y si se cumplen las expectativas del grupo español de telecomunicaciones, a finales de siglo telefónica tendrá repartido su volumen de mercado al 50% entre líneas nacionales y extranjeras.