A preguntas de un accionista, Echevarría señaló que Telecinco estudiará "a fondo" las posibilidades que existen de fusionarse con otra cadena con la que, entre ambas, no superen el 27% de audiencia, como fija de tope el decreto.

"Telecinco tendrá conversaciones con otras televisiones y tomará la decisión que crea más conveniente, que será la que le convenga a sus accionistas, como siempre hemos hecho", afirmó .

No obstante, el presidente de Telecinco dijo que ésta no es "la solución" que demanda el sector privado. "La medida más importante para el mundo audiovisual español no es está, sino la reestructuración del modelo de televisión pública, que incluye no sólo la reducción de publicidad, sino la transformación del modelo" de cadenas públicas, tanto nacional como autonómicas.

Echevarría recordó que el Gobierno tiene un compromiso y en Telecinco están "convencidos" de que "cumplirá sus promesas". "El Gobierno estudia diversas fórmulas y confiamos en que en un plazo no demasiado largo puedan verse medidas con carácter definitivo, y no esa reducción simbólica de 11 a 10 minutos de anuncios en TVE que no ha tenido efecto en la práctica", remarcó.

Por su parte, Paolo Vasile, consejero delegado de Telecinco, afirmó que 2008 fue duro por el desplome publicitario y por la política de RTVE. Vasile acusó a TVE de haber "retomado la agresividad de sus peores épocas, compitiendo con fuerza y deslealtad al amparo de grandes gastos".

A su juicio, la cadena estatal ha subido el coste de los derechos al tiempo que bajaba los precios de su publicidad, provocando unas dificultades al sector "que estamos padeciendo todos".

Sobre la pérdida de liderazgo de audiencia de Telecinco en favor de La 1 en los últimos cuatro meses, comentó que la cadena tiene un equipo de Contenidos muy bueno y la recuperación del primer puesto se podrá lograr "en un tiempo razonable". La receta es clara: "Trabajar más, estar continuamente pendientes de las señales del público y seguir experimentando".