A juicio de Tele 5, "algunos gobiernos no liberales han sucumbido a la presión de determinados grupos de televisiones públicas europeas", aceptando una medida que "hiere de muerte a la construcción comunitaria, basada en un mercado libre".

Tele 5 considera que no s puede aceptar "que operadores económicos como son las televisiones públicas queden siempre e incondicionalmente fuera de las reglas de competencia". Por ello, entiende que el Gobierno que preside Aznar debe oponerse al protocolo si quiere ser consecuente con su política de liberalización y su apoyo al funcionamiento del mercado en competencia.

La cadena privada estima que las subvenciones y ayudas que reciban del Estado las televisiones públicas deben ir destinadas exclusivamente a finalidades de sericio público, mientras que el protocolo prevé una financiación ilimitada e injustificada.