Gestha aboga por introducir "importantes" modificaciones en la tributación por módulos, con el fin de que el sistema sea "más justo" y evite este tipo de comportamientos.

Según los técnicos de Hacienda, la trampa del sistema de módulos radica en que los comerciantes no tienen la obligación de llevar contabilidad ni guardar las facturas a efectos fiscales, "de lo que se aprovechan muchas empresas para defraudar a Hacienda".

Asimismo, Gestha cree que el sistema de módulos propicia que el comerciante empuje a sus proveedores a que le vendan sin IVA. La razón es que, a efectos de su tributación, pagar IVA no le reporta ningún beneficio y pretende ahorrárselo. De este modo, el empresario se reduce el 35% del Impuesto de Sociedades y el 16% del IVA, defraudando así a la Administración.