La manifestación recorrerá las calles Virgen del Puerto, Cuesta de la Vega, Bailén y Mayor, para terminar frente a la sede del Ayuntamiento de Madrid.

Los taxistas protestarán por la negativa "injustificada" del Ayuntamiento de Madrid a permitir que puedan llevar publicidad en sus vehículos, lo que les reportaría unos ingresos adicionales que les permitirían compensar las subidas de costes del carburante, entre otros, según los convocantes.

A su juicio, dicha prohibición resulta además "discriminatoria", cuando "sí permite que lleven publicidad exterior sus autobuses de la EMT, los autobuses turísticos, los chirimbolos y marquesinas instaladas en toda la ciudad, las cabinas telefónicas, etc.".

Según sus cálculos, esta prohibición del Ayuntamiento ha supuesto la pérdida de varias campañas publicitarias en los dos últimos meses por importe superior a 600.000 euros.

También afirman que el Ayuntamiento ha negado una campaña de publicidad que el colectivo del taxi iba a hacer de forma gratuita a favor de Intermón para recaudar fondos para niños huérfanos del Tercer Mundo.