Estos datos están recogidos en un estudio sobre la situación de la mujer en la Comunidad de Madrid que fue presentado por el secretario general de CCOO Madrid, Javier López, y la secretaria de Mujer y Solidaridad Internacional de CCOO Madrid, Pilar Morales.

Según este informe, elaborado con datos del primer trimestre de 2006, el 62% de los parados de la región son mujeres, quienes también representan el 71% de los desempleados de más de un año. En el margen de edad de mayor actividad, entre 25 y 44 años, las mujeres son dos de cada tres parados.

En referencia a estos datos, Javier López manifestó que "la mujer no sólo está discriminada en el tercer mundo sino también en países que aspiran a situarse en el nivel de los estados punteros en Europa".

Asimismo, López denunció que más del 80% de las mujeres trabajadoras desempeñan empleos mal pagados, de menor estabilidad y con menos posibilidades de promoción.

En cuanto a la tasa de actividad, el informe revela que más de la mitad de las madrileñas en edad activa no trabajan. Concretamente, el 49,3% de las mujeres tienen empleo, frente al 66,3% de los hombres. La tasa de actividad femenina es del 53,3% frente al 70% masculino.

En otro apartado, el estudio revela que el 82% de las mujeres cuentan con contratos temporales y que ellas representan el 70% de los trabajadores con contratos a tiempo parcial.

Por otra parte, su salario medio es un 32% inferior al de los hombres siendo el desfase mucho mayor entre los que no tienen estudios, segmento en el que alcanza el 52% de diferencia.

Entre los que tienen sólo estudios primarios, la diferencia es del 41%; entre los diplomados del 37%; entre los licenciados e ingenieros del 36%; y entre los que tienen FP de grado superior del 29%.

Finalmente, el estudio señala que la situación discriminatoria también aparece entre los sectores desfavorecidos. En concreto, la tasa de paro de las mujeres discapacitadas es del 54% frente al 15% de los hombres y el salario de las inmigrantes, unos 550 euros mensuales, es un 28% inferior al de los hombres venidos de otros países, cuyo sueldo medio no supera los 800 euros.