Las fuentes consultadas indicaron que, de mantenerse el precio del dinero en los niveles actuales, el efecto económico de la subida de tipos de interés deberá ser compensado en el decreto de tarifas del año que viene,ya que la medida del Banco de España no había sido contemplada en la previsión del ministerio para fijar el coste de la luz en 1995.

La subida de 1 punto en los tipos de interés oficiales tiene por término medio un efecto en tarifas de unos 50.000 millones de pesetas, por lo que el aumento adoptado por la autoridad monetaria (0,65 puntos) conllevaría unas consecuencias de unos 32.500 millones de pesetas.

También indicaron que, una subida de 1 punto en los tipos de interés conlleva un aumento en l tarifa de 2,5 puntos, por lo que la última elevación del precio del dinero, de persistir a finales de año, obligaría a un aumento de al menos el 1,7 por cien en el precio de la luz de 1996, además de las previsiones de inflación y el resto de elementos que componen el recibo.

Entre los aspectos que contempla cada año el decreto de tarifas figura la previsión de tipos de interés y el coste de financiación de la actividad de las empresas, así como su obligación de consumir carbón nacional (más caro queel extranjero), la amortización de la moratoria nuclear y el coste de la energía.

De estos aspectos que se compensan a través de la tarifa, el de los tipos de interés tiene un efecto especial, ya que buena parte de la deuda en pesetas contraída por el sector está sujeta a un tipo variable.

Así, Cantábrico tiene a tipo variable el 67 por cien de su deuda en pesetas, un 91 por cien del total; Sevillana, un 56% sobre una deuda en moneda española del 83%; Iberdrola, el 67% sobre el 70% del total; Unin Fenosa, 70% sobre el 75%; Fecsa, el 25% sobre el 75%, y Endesa, el 55% sobre el 81%.