Algunas de las afectadas consultadas por Servimedia, indicaron que "no es posible seguir trabajando como lo estamos haciendo, sin horarios, con sesiones maratorianas que acaban a las 12 o la 1 de la madrugada y que originan desmayos los por pasills, porque no da tiempo ni de comer".

La medida de fuerza adoptada por las taquígrafas impidió la comparecencia de la directora general de la Vivienda, del director general del Insalud, del subsecretario del Ministerio de Trabajo, del secretario general de la Seguridad Social, del director general del INEM y del secretario general de Turismo, entre otros altos cargos de la Administración y organismos públicos.

La protesta originó una reacción inmediata de los órganos gestores de la Cámara, así com una reunión con dos miembros de la Mesa del Senado para escuchar las reivindicaciones de las trabajadoras.

Su principal reivindicación es que se fijen unos turnos y se amplíe la plantilla, en la que aseguran no alcanza la mitad de las que hay en el Congreso de los Diputados actualmente.

Este extremo fue confirmado por algunos senadores del Partido Popular (PP) y del PSOE consultados, quienes entienden que "debería ampliarse el número de taquígrafas para que puedan desarrollar su trabajo en condiiones más normales".