La directora conservdora del parque nacional, María Jesús Sánchez, declaró hoy a Servimedia que las lluvias registradas el pasado invierno y el trasvase permiten ser optimistas de cara al futuro próximo y espera que 1996 sea un buen año de cría para las aves, rompiendo la tendencia negativa del último lustro.

María Jesús Sánchez señaló que el agua está llegando con normalidad, una vez resuelto los problemas surgidos con la derivación que se realiza hacia la Laguna de Villafranca de los Caballeros (Toledo).

La Lagunade Villafranca de los Caballeros tiene una concesión que le permite derivar 50 litros por segundo. Sin embargo, los primeros días tomó más caudal del permitido, por lo que tuvo que intervenir la Confederación Hidrográfica del Guadiana para corregir esta irregularidad.

El agua del trasvase terminará de llegar a las Tablas de Daimiel a mediados de abril y, aunque María Jesús Sánchez prefiere no aventurar qué superficie quedará encharcada cuando finalice, los responsables del parque esperan que se supereel millar de hectáreas.