La OMS basa su propuesta en un estudio realizado durante un periodo de tres años, en el que se demuestra que jóvenes y fumadores de los países en vías de desarrollo serían los primeros grupos en disminuir el consumo si subieran los impuestos que se aplican al tabaco.

La OMS considera que fumar mata a más de 4 millone de personas al año y que la cifra llegará a los 10 millones en el año 2030, debido al consumo en países como China. Estos datos alarmantes se desprenden del estudio sobre el "Control del Tabaco en los Países en Vías de Desarrollo", que considera la subida de los impuestos sobre estos productos una medida eficaz para reducir el número de afectados por enfermedades relacionadas con este hábito.

Aunque las compañías tabaqueras agrupadas en la British American Tobacco rechazan las subidas, el estudio maniene que esta medida evitaría que fumaran muchos jóvenes, personas pobres y de los países menos desarrollados. "Está muy claro que los mayores precios disminuyen el consumo, especialmente entre los jóvenes. En Canadá, a finales de los 80 y principios de los 90, cuando aumentaron de forma importante los precios, el consumo disminuyó entre un 50% y un 60%", según uno de los autores del estudio.

El aumento de los precios puede ser especialmente efectivo en los países en vías de desarrollo, donde se prevé la mayoría de las futuras muertes. La propuesta, que algunos rechazan aduciendo la disminución de empleo que acarrea, sugiere que otras medidas anteriores, como las restricciones al suministro o prohibiciones parciales de consumo, tienen un efecto muy limitado para atajar el problema.