"Un irlandés me decía hace poco que prohibir fumar en un pub en Irlanda era como prohibir el sexo en el dormitorio", dijo a Servimedia Garrido, quien aseguró que implantar esta medida en España provocaría el efecto contrario al perseguido cundo se prohibió consumir alcohol en la calle, es decir, que la gente tenga que salir de los bares para fumar.

A su juicio, los bares están pensados para que las personas se diviertan, se tomen una copa y se fumen un cigarrillo si les apetece. "Yo creo que es exagerado, que es una medida que parte una vez más del fundamentalismo que se ha creado en torno a la salud", señaló.

Garrido no descartó, sin embargo, que la prohibición irlandesa pueda llegar a España, ya que es una de las líneas de actuacin recogidas en el Plan contra el Tabaquismo. La cuestión, añadió, es saber hasta qué punto se va a dejar cierto espacio para que el propietario del local habilite zonas en las que se pudiera fumar.