El tabaco de contrabando representa un 17 por ciento ----------------------------------------------------
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"Las propias multinacionales del sector son las que promueven el contrabando de tabaco", afirmó a Servimedia Manuel Fernández Vicario, presidente de la Unión de Asociaciones de Estanquros de España, en un año en que el consumo de cigarrillos rubios no legales alcanzará el 17,4 por ciento del total consumido.
La proliferación del tabaco de contrabando se va acentuando en los últimos años, pese a todos los esfuerzos realizados por las autoridades para eliminarlo. Cada día es más frecuente encontrarlo en el metro (en Madrid), en todos los semáforos (Málaga o Sevilla) o en calquier bar de la geografía nacional a 200 pesetas para las marcas más altas de la gama -Winston, Marlboro y Came-, cuando en el estanco cuesta 245 pesetas.
La causa para el máximo responsable de los estanqueros es que las multinacionales tabaqueras no quieren perder ningún tipo de cuota de mercado a manos de sus competidores, y lo que dejan de vender legalmente, lo recuperan en el mercado negro.
Una cajetilla de las marcas señaladas tiene un precio de venta del fabricante de unas 40 pesetas y lo mismo cuesta para el distribuidor legal que para el traficante.
Sin embargo, Fernández Vicario dejó claro qe los fabricantes franquiciados de estas multinacionales en cada país no son responsables del contrabando y les perjudica. En El Paso (Santa Cruz de Tenerife) la fábrica de RJ Reynolds (Winston) ha tenido que cerrar del 5 al 25 de abril por el descenso de las ventas. En cambio, las multinacionales conocen que cuando venden determinadas partidas van dirigidas al mercado de contrabando.
El problema se ha agravado en los últimos años. En 1991 supuso para la Hacienda pública 23.000 millones de pesetas no ngresados (el 50 por ciento de venta de tabaco son impuestos) en 1991, y se incrementó en 1992 hasta alcanzar los 70.000 millones, según datos de la Asociación Española del Tabaco.
Las perspectivas son de que este aumento continúe, ya que un estudio realizado por una empresa del sector en 1993, al que ha tenido acceso Servimedia, indica que el consumo de tabaco rubio de contrabando alcanzará en el bienio 1992-93 el 17,4 por ciento del consumo total, frente al 13,5 por ciento de los dos años anteriores(el márgen de error de este informe es del 2 al 5 por ciento).
Las marcas que mayor participación tienen en el consumo de cigarrillos de contrabando son Winston (68 por ciento), Marlboro (25 por ciento y con tendencia a subir), y Camel (3 por ciento), y las comunidades autónomas con mayor consumo son Galicia, País Vasco y Andalucía.
MULTAS DE 2 MILLONES
Para combatir esta situación, que a los estanqueros les hizo perder el año pasado unos 12.343 millones de pesetas, sobre unas ventas no realizaas de 145.219 millones, Fernández Vicario solicitó que se cumpla la actual legislación, que supone multas para los responsables de la venta de 100.000 a 2 millones de pesetas y el cierre del local.
El presidente de la Unión de Asociaciones de Estanqueros también reclamó mayor colaboración internacional y de las autoridades policiales españolas, ante un acto ilegal que, sin embargo, tiene la aprobación social.
Según fuentes del Servicio de Vigilancia Aduanera, que está dedicado a la lucha contra tdo tipo de contrabando, ha sido la desaparición de las fronteras la desencadenante de la aparición de tabaco ilegal, contra el que es "más difícil" luchar y exige una mayor coordinación entre los países de la CE.
En 1992, este servicio intervino 11.408 millones de cajetillas, con un coste de 2.745 millones de pesetas. Aunque la mayoría del tabaco de contrabando entra por Andorra y Gibraltar, las fuentes de la Administración consultadas afirman que se han mejorado las relaciones con el Principado y la oca, lo cual ha sido desmentido rotundamente por los estanqueros.
POBRES DE 200.000 PESETAS
Manuel Fernández Vicario, también pidió que los ayuntamientos requisen el tabaco vendido al por menor en la calle, "ya que los pobrecitos que lo venden sacan unas 200.000 pesetas limpias al mes, mientras que muchos de los que tenemos estancos no llegamos ni a esa cantidad antes de impuestos".
"Lo que ocurre es que con el clima de corrupción existente, la gente no se da cuenta que cuando compra tabaco de ontrabando está estafando a Hacienda, y socialmente está mal visto reprimir su venta. En Europa esto sólo pasa en Italia y España", aseguró.
El descaro de los vendedores llega hasta a ofrecer a los propietarios de bares andaluces por carta tabaco de contrabando traído de Andorra, en la que el ofertante no oculta ni su nombre ni su dirección en Manresa (Barcelona).
Lo último es la venta de marcas nacionales o fabricadas casi exclusivamente en España, tales como Ducados o Fortuna, que han llegado aser ofrecida a la Asociación de Tabaqueros de Madrid.
(SERVIMEDIA)
18 Abr 1993
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