El corte parcial de la nacional I (Madrid-Irún) comezó a las doce de la noche de ayer, lunes. Las obras, que durarán cuatro meses, tienen como fin la acometida de un túnel que unirá en un futuro próximo esta carretera con la M-40, a través del nudo de Manoteras.

El servicio interurbano de autobuses que cubre el trayecto entre Madrid y Alcobendas y San Sebastián de los Reyes se está viendo especialmente afectado por este desvío provisional.

El alcalde de Alcobendas, José Caballero, señaló que el desvío se ampliará en los próximos meses, por lo que s previsible que las obras repercutan aún más sobre el tráfico, ya de por sí conflictivo, en esta entrada a Madrid.

Por ello, Caballero recomienda a los conductores que utilicen vías alternativas, como la carretera de Fuencarral, que tiene abiertos nuevos accesos por el polígono industrial, o la autovía de Colmenar Viejo, que permite acceder al municipio por la carretera de El Goloso.

Asimismo, el alcalde ha solicitado a la empresa que realiza las obras el establecimiento de turnos de noche para gilizar la construcción y evitar las molestias en la medida de lo posible.

Por otra parte, José Caballero indicó que el MOPU no comunicó al ayuntamiento el inicio de las obras, por lo que la corporación no ha podido poner en marcha medidas especiales para regular el tráfico en las salidas y entradas al municipio.