Rodríguez Ibarra presentó la denuncia contra Manzanares a raiz de unas manifestaciones efectuadas por éste en Valladolid, en las que calificó de "ruin" la actitud del presidente extremeño en relación con el juez instructor del "caso Filesa", Marino Barbero.

En un autohecho público hoy, el presidente de la Sala Segunda, Enrique Ruiz Vadillo, instructor de la causa, destaca que la respuesta de Manzanares se refiere a unas manifestaciones "concretas y específicas" de Rodríguez Ibarra "que cuestionaban la honorabilidad del juez encargado del 'caso Filesa'".

Estas hacían referencia "a la forma en que se recibió el piso familiar que utiliza el magistrado para vivir", una operación que, a juicio de Ruiz Vadillo, nada tiene que ver con la tarea judicial, "pero que puede cnllevar un determinado mensaje por las palabras allí proferidas", por lo que Manzanares respondió entendiendo que "pueden reducir el nivel de independencia del magistrado-juez por la presión que aquéllas pueden suponer".

Indica que Manzanares utilizó la palabra "ruin" como sinónimo de inaceptable y destruible, y señala que como se trata de dos autoridades de elevado rango y que ninguna actúa en el ejercicio específico de sus cargos, sino con motivo de ellos, no puede haber desacato porque no hay injura ni ánimo de ofender o agraviar.