Dentro de la cuenta corriente, los bienes y servicios reflejaron 60.100 millones, cifra que está muy por encima de los 16.300 millones registrados en 2022. De esta cifra, turismo y viajes supuso 59.700 millones, con un crecimiento del 23,3%, mostrando así la recuperación de esta actividad después de la caída por la pandemia.

Por su parte, la renta primaria y secundaria, que incluyen rentas del trabajo, impuestos sobre producción e importación, cotizaciones y prestaciones sociales, reflejó un déficit de 23.500 millones, muy por encima de los 8.100 millones deficitarios de 2022.

En suma, las cuentas corriente y de capital totalizaron un saldo positivo de 51.400 millones, que muestran la capacidad de financiación de la economía española. La cifra fue más del doble respecto de los 20.700 millones obtenidos en 2022.

Solo en el mes de diciembre, la cuenta corriente mostró un superávit de 1.100 millones, ligeramente por encima de los 900 millones de diciembre de 2022, con el turismo y viajes con 2.800 millones, 1.000 más que en 2022. La cuenta de capital se mantuvo invariable en los 3.800 millones, y la suma de la corriente y la de capital también lo hizo en 4.800 millones.

En el conjunto de 2023, el saldo neto de la cuenta financiera excluyendo el Banco de España fue negativo, de 56.300 millones, frente a los 4.100 millones negativos de hace un año.