Para Sáncez Fornet, el modelo policial que se adopte en virtud de los acuerdos PP-CiU ha de ser "más ágil y coordinado" que el actual y debe contemplar una delimitación clara de competencias de los diferentes cuerpos, a fin de resolver el actual problema de coordinación que existe entre ellos. En cuanto a la Benemérita, exigió su desmilitarización y que se encargue de la vigilancia de las fronteras.

El líder del sindicato policial se mostró de acuerdo con la creación de una auténtica policía catalana, ya que asu juicio es una demanda del pueblo catalán que ha de ser satisfecha, como se hizo con la Ertzaintza en el País Vasco, aunque reiteró la importancia de que sus actividades estén coordinadas con las otras fuerzas policiales de España.

Por su parte, el secretario general de la Asociación Nacional de Policía Uniformada (ANPU), Angel Martínez Sendino, coincidió con su homólogo del SUP en que es necesario reformar la Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (LFCSE) -uno de los puntos del pacto firmdo por el PP y CiU-, especialmente en el capítulo referente a las competencias que corresponden a cada cuerpo.

Martínez Sendino manifestó su esperanza en que el nuevo Gobierno lleve a cabo de una vez la "necesaria" modificación de la LFCSE y dijo que es una buena señal que el nuevo Gobierno muestre su voluntad de "coger el toro por los cuernos".

Sin embargo, no quiso mostrarse excesivamente optimista con respecto a lo que supone una de las "grandes reivindicaciones" de los sindicatos policiales, asta que se conozcan los proyectos concretos del PP en materia policial.

A su juicio, la reforma debe abarcar una delimitación de las competencias de los distintos Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, de su régimen disciplinario, de la organización de sus respectivas plantillas y de la policía judicial.